Libro del autor Jesús Bonilla
Para el autor Jesús Bonilla, debes creer en lo nuevo, ya que siempre es mejor que vivir de lo viejo. Muchos suelen imaginar la vida como una constante ilusión, pues viven alimentándose de deseos, ideales y anhelos que solo se vuelven realidad en la imaginación.
Si la cultura y las limitaciones que rodean a quienes así piensan son restrictivas, es casi imposible ir más allá de una vida con pocos logros. El ser adulto nos exige ir cambiando nuestra forma de pensar para que podamos mantener la esperanza y así volver nuestros sueños en realidad.
Para muchos, los cambios reales tienen como resultado más problemas que soluciones. Pero esta es un error, ya que constantemente todo está cambiando. Y es sumamente importante lograr este cambio de actitud al enfocarlo en nuestros sueños y metas, señala el autor.
Los cambios conllevan beneficios
Bonilla menciona al inicio de la adultez como un momento perfecto para emprender un cambio, ya que la mayoría de los que están más dispuestos a una transformación son los jóvenes, entre los 20 y 25 años, ya que existe más voluntad para hacer verdaderos cambios que determinen su camino de vida. Sin embargo, pasa el tiempo y sentimos que somos demasiado viejos para hacer un cambio y seguir otro camino.
Sin embargo eso no es real. Necesitamos tener el valor y la energía de los jóvenes para seguir cambiando siempre que sea necesario. Ya que a veces, sólo una tragedia nos lleva a cambiar el estilo de vida y los caminos que tomamos para seguir adelante.
El autor cuenta la historia de un niño de tres años que perdió los brazos en una tragedia. Después de un tiempo, él y sus padres aceptaron esta nueva realidad y fueron adaptándose a las nuevas condiciones para continuar su vida. A veces, nosotros pasamos por malos momentos y pensamos que no los vamos a superar o es el fin, pero estas tragedias pueden empujarnos hacia adelante.
¿Cuestión de suerte? No exactamente
Las cosas buenas de la vida no son simplemente una cuestión de suerte; muchas veces vemos el éxito de muchas personas como si fuese simple casualidad, pero no es así. ¿Ya pensaste qué actitud tomaron aquellos que sonríen todo el tiempo?, pregunta Bonilla. ¿Cuánto tiempo y esfuerzo fue necesario para que la “suerte” estuviera presente en sus caminos?
Las conversaciones positivas y sanas con las personas de éxito nos llevan a creer en que los cambios y éxitos sólo son posibles si hay una actitud para colocarnos en los mejores caminos que queremos. La vida lleva su inercia: Si seguimos como estamos, el camino no va a cambiar.
El compararse constantemente
El autor menciona firmemente que el estar preocupándonos constantemente del “qué dirán” una pérdida de tiempo y esfuerzo. Y si estamos comparándonos con la vida de otros, el desperdicio es aún más grande y un completo error. No se tiene ningún beneficio con estos pensamientos, sólo angustia. Tampoco es mejor el ser vanidoso por estar en una buena situación. Sólo dependemos de nosotros y sólo necesitamos compararnos con nosotros mismos.
El éxito es una cuestión de estar bien contigo mismo y sin estar comparándose con otras personas alrededor. ¿Me motiva lo que más quiero en la vida? ¿O me paraliza lo que más temo que suceda en la vida?
Según Bonilla, debes considerar qué lo que más quieres para tu vida. Los deseos y metas son muy diferentes de acuerdo con cada persona y su vida, y nunca es la misma que la de otros. Lo que más quieres para tu vida debe motivarte a querer siempre lo mejor, debe ser un buen motivo para despertarte temprano y pelear para conquistarlo. No necesariamente tiene que ser una cosa difícil de alcanzar, solo con que sea la suficiente motivación para que desees ser más feliz en el futuro. ¿Cómo lo qué más quieres para tu vida te motiva? ¿Cómo ésta motivación te cambia la actitud?
Al tener la actitud correcta, las cosas que temes no te podrán detener jamás. El miedo de perder no puede superar tus ganas de ganar. ¿En qué punto están tus motivaciones y tu miedo?
Que brille tu estrella
¿Qué es tu estrella? Es alguna característica que te hace llamar la atención de todos los que están alrededor tuyo, como el carisma o la generosidad. La forma con que tratas a las personas que están contigo o a tu alrededor es lo primero que necesitas comprender si quieres tener tu estrella en un lugar de alta estima.
Saber conversar con las personas es fundamental para que ellas puedan comprender tus actitudes, tanto las buenas como las malas. Ya que en ocasiones, cambiamos de actitud y cometemos errores, comenta el autor. Si tienes buenas relaciones y utilizas tu estrella para que puedan comprenderte, verás que hasta tus malas actitudes serán vistas con otros ojos, unos de comprensión de la situación y de que vas a aprender y mejorar de ella.
La oveja negra
En un mundo en que la gran mayoría de las personas siguen los mismos caminos, el término “oveja negra” representa al malo, lo rebelde. Pero en realidad es sólo “algo diferente”. Si no te sientes bien sólo siguiendo un camino por inercia, estás en esta categoría.
Cuando no queremos seguir el mismo camino que los demás no han elegido, sino que sólo lo siguen, es buena idea ir al otro lado. Ser diferente al resto no es malo, ni bueno: es simplemente un camino.
Aunque la “locura” parezca algo malo, a veces es la razón. Conectarse con la realidad y descubrirte como una oveja negra es fundamental si quieres determinar a dónde vas a llegar. Hasta en la misma Biblia verás pasajes de personas que cuestionaron los órdenes.
Una buena actitud lleva a una buena relación
Si las actitudes que tomas colocan al otro en primer lugar, viéndolo también como algo importante, tu perspectiva se perfeccionará para que puedas establecer relaciones importantes. Serás visto como una persona que no se preocupa solamente por sí mismo, comenta Bonilla. Tendrás una imagen de quien cuida a su alrededor como un todo. Sólo podrás tener buenas relaciones cuando te des cuenta de que cambiar depende de todo el mundo, no sólo de una persona.
Con todo el corazón
El corazón es la fuente de todos los sentimientos, deseos, intenciones y sentido de culpa o libertad. Es desde allí que surge el tropiezo o la dignidad de cada acción y decisión que tomamos en cada momento, explica el autor.
Si te sientes competente para amar o ser amado, es el corazón el que acepta estos sentimientos y crea otros, tanto positivos como negativos que te ponen por debajo de la capacidad que tienes. La decisión de amar surge en el corazón. Ahí comienza con un encuentro, una experiencia genuina y circunstancial. No se trata sólo en los casos de amor romántico de pareja, porque el amor se manifiesta en todas las relaciones humanas posibles.
Si no cuidas bien de tu corazón, no tendrás la facilidad de sentirlo, ya que el corazón alegre se refleja en el rostro, y el corazón dolido deprime el espíritu. Si cuidas tu corazón comprenderás los buenos sentimientos que la generosidad te trae cuando la practicas. Es como la marea que lleva, eleva y empuja a los barcos; todos los que la sienten y la practican son beneficiados por ella.
Comenzar a dar no es sólo dar dinero y posesiones. Platicar con aquellos que necesitan oír un buen consejo o guía también es una tarea de generosidad extrema. Saber estar con aquellos que están a nuestro lado es lo que hace de la generosidad uno de los mejores sentimientos.
La lealtad es con la que empezamos a confiar en las personas. Si alguien confía en nosotros o si confiamos en alguien de una manera que supera los obstáculos, tendremos una actitud mejor que la de resto de las personas que temen a las ovejas negras.
Ser agradecido también es parte de la fórmula. Ser agradecido con las personas que están con nosotros todos los días es más que una sencilla actitud: es la obligación de quienes desean cambiar su destino y seguir mejores caminos. Decir “gracias” con todo el corazón transforma el comportamiento de quien lo oye. Pon esta simple palabra en tu boca y verás que todos los otros sentimientos estarán junto de los que te rodean.
Con toda el alma
De nada sirve el adoptar nuevas actitudes para cambiar la vida si no pones toda tu alma en ellas, menciona el autor. No es como una tarea burocrática que necesitas resolver hoy: tenemos que poner toda el alma en cada pequeñita actitud tomada para seguir adelante. Pensar que las cosas que haces son para un bien mayor es fundamental para que sigas.
Con toda la mente
Lo mismo aplica para la mente. Pensar en los rumbos del nuevo camino a tomar es una tarea diaria. Tienes que racionalizar tus actitudes, aunque jamás deberás sacar el alma y el corazón en todo lo que haces. No se trata sólo de ser consciente de todos los pasos tomados, sino de aprender un poco todos los días.
Para que puedas expandir tus habilidades, tengas mayor facilidad de controlar el tiempo y ganar más dinero, necesitas invertir en tu mente. Para lograrlo, es muy importante leer buenos libros, estudiar cursos que te hagan crecer más y dar prioridad a la preparación de una vida mejor.
Tener actitud es darle fuerzas a tu mente, como lo haces al leer este libro; Lo que nos separa del éxito es la actitud. Toma la mejor actitud, busca mejorar y verás que todo estará más cerca en poco tiempo.
Conclusión
Muchas veces pensamos que sólo el destino y la suerte son los culpables de que no hayamos conseguido algo en nuestra vida, ya sea ser en la vida familiar, profesional o en las relaciones amorosas. El secreto está en la actitud. Es lo que nos separa de los verdaderos éxitos que nos llevan a un futuro mejor y con más realizaciones soñadas todos los días.
Jesús Bonilla deja claro cuáles son las maneras necesarias para que salgamos de la zona de confort y construyamos nuestro propio futuro. Haciéndonos ver el camino de una manera más positiva por medio de actitudes sencillas y diarias, y así quedamos cada vez más cerca de una vida soñada por todos los que no se conforman con una vida a medias.
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